viernes, 7 de septiembre de 2018

LOS SANTOS DE EL RAÑADOIRO


LOS SANTOS DE EL RAÑADOIRO - a propósito de una restauración de imágenes del s. XV (?) acaecida recientemente en Asturias

Dos ejes de interpretación y un trasfondoJosé Feito Fernández

La prensa diaria aporta el duro trabajo “a pie de obra” de muchos periodistas noveles. No necesitan viajar a la polinesia, ni a África para aportar datos de campo, datos primarios, transformados luego en información y conocimiento, por la industria transformadora de la ideología. Quiero, claramente, ensalzar la labor de estos jóvenes, cronistas de un mundo rural que desaparece en Asturias. Sigo sus crónicas sobre vacas abandonadas, sobre aparición de animales fuera de su entorno, sobre milagros y apariciones. Aquí, en Asturias,
estos son nuestros pequeños John Berger.

Y, dicho lo que precede, entro en el asunto.

Un eje de reflexión sobre la “restauración” de “Los santos de El Rañadoiro” nos conduce al abandono en que se encuentra el inmenso patrimonio cultural del Concejo de Tineo. El Monasterio de Obona. El Monasterio de Bárcena. Solo por citar dos casos.

Otro eje, cruza el anterior y pasa irremediablemente por la insuficiente capacidad de vigilancia solvente por parte de la Iglesia Católica provincial.

En el trasfondo si sitúan los restos en desaparición del mundo rural asturiano. La “restauración” de referencia no es más que una expresión superficial, un epifenómeno, una ‘punta de iceberg’ del mundo de representaciones hegemónico en las áreas rurales (¿sólo rurales?) asturianas. ¿Qué se está entendiendo por moderno, modernidad, modernización? ¿Qué se está entendiendo por innovación? ¿Qué se está entendiendo por bello, belleza, …? ¿Qué se está entendiendo por desarrollo?

No, no se trata, por tanto, del error de una persona aislada.