domingo, 19 de enero de 2014

"EL DILEMA DE ESPAÑA" - algunas acotaciones a Luis Garicano

EL DILEMA DE ESPAÑA” [I]
[Entre Venezuela y Dinamarca
– algunas acotaciones a Luis Garicano –]

Leo la entrevista de Luis Garicano en El Mundo (17/01/2014) y compro a continuación su libro (en la nueva Librería Santa Teresa – ya lo tenían el mismo día). Aún no lo leí entero de forma ordenada, solo “a saltos”. No obstante obedezco al imparable impulso de iniciar ya algún comentario sobre el mismo. Me pareció un libro muy pertinente, muy necesario y que recomiendo a todo el mundo.

Y, para situar al autor, comienzo reproduciendo un fragmento de texto muy significativo, situado en la página 177:

Nací en Valladolid en el año 1967. Mi generación llegó a la madurez convencida de que España se había convertido en un país normal. Pasados los temores a conflictos armados y a dictaduras, primero la Constitución de 1978, luego la entrada en la OTAN y por fin la ansiada entrada en la Unión Europea anclaban definitivamente a España en una Europa de cuya historia se había ido separando poco a poco.”

En este fragmento, además de enmarcar el contenido de su libro, Garicano muestra su sensibilidad hacia la imagen fiel, hacia la transparencia (al explicitar aspectos de percepción, haciendo, así,  aislables los sesgos en que pudiera incurrir).

Y prosigue:

(…)”Desgraciadamente, en los últimos cinco años hemos presenciado la destrucción de ese país imaginado. La imagen que teníamos de España era errónea, ahora lo sabemos, pero era aquella con la que mi generación había crecido”

Otros sin embargo, entre los cuales me incluyo, ya nos habíamos dado cuenta mucho antes. Ya observábamos a lo largo de los ochenta, la manera en que se abordaba la reestructuración industrial asturiana, la manera en que se pretendía promocionar el desarrollo económico de esta región, los primeros fenómenos de mangoneo y clientelismo. Se veían en la Caja de Ahorros de Asturias y en algunas dependencias del Gobierno Regional [a]. Mucho más tarde, ya al comienzo de los noventa se dan una serie densa de corruptelas y corrupciones (este era el país donde uno podía hacer rico más rápido y fácilmente, como diría con similares palabras un ministro de economía en activo a la sazón). Y ya pudimos ver, durante el último gobierno de Felipe González, una imagen de gran fuerza expresiva: la coincidencia simultánea en la cárcel el jefe del banco emisor y el jefe de las fuerzas de orden público.

Si todo hubiera funcionado como los españoles deseábamos, la entrada de España en el euro habría supuesto la culminación del proceso de modernización que comenzó el 6 de diciembre de 1978 con la aprobación en referéndum de una nueva Constitución democrática. Desgraciadamente, la entrada en el euro, que llevó a la eliminación del riesgo cambiario, junto con el ‘boom’ financiero mundial, supusieron una relajación brutal de las restricciones presupuestarias de las familias, de las empresas y de los Gobiernos   (pág. 15)

Los factores señalados por Luis Garicano se encuentran perfectamente identificados y coincidimos en los mismos. Pero hay más factores y de peso muy relevante. En mi opinión el proceso de modernización se vio abortado de manera muy temprana, si incluimos en la modernización algunos conceptos weberianos y otros emparentados con ellos. El tránsito de una dictadura a una democracia para que sea realmente tal, debe comportar el diseño, instalación y mantenimiento de mecanismos de control / vigilancia (procedimientos) en el sistema económico y en el sistema jurídico – político, con importantes repercusiones en el sistema – cultura (sistema de valores, reglas de juego no positivazas; o dicho con mayor esquematismo: moral ciudadana). Los partidos políticos, los sindicatos, los gobiernos, las empresas y los individuos se movieron en ausencia de procedimientos adecuados.

Dice Garicano (pág. 16) Desgraciadamente, la secuencia de escándalos de corrupción que ha sufrido España en los últimos años muestra con claridad el envilecimiento del que han sido víctimas las instituciones como consecuencia de la burbuja inmobiliaria. Claro está que la burbuja inmobiliaria hizo muy visibles en superficie de fenómenos de corrupción preexistente y cuya causa central es, en mi opinión, la ausencia de mecanismos de control / vigilancia idóneos y en estado de funcionamiento idóneo.